Un legado de magia y nostalgia

Después de 28 años, Harry Potter y la Piedra Filosofal no ha perdido ni un ápice de su encanto. Al contrario, con cada aniversario su legado crece y se renueva. Aquellos niños que alguna vez esperaron su carta de Hogwarts ahora son adultos que releen la saga con cariño o la comparten con sus propios hijos, transmitiendo la magia a una nueva generación.

En las estanterías de las librerías, este primer tomo sigue siendo un imprescindible de la literatura juvenil, un puente entre distintas generaciones de lectores que se maravillan por igual con la amistad de Harry, Ron y Hermione, con la sabiduría de Dumbledore o con la inolvidable invitación a Hogwarts:

“Querido señor Potter, nos complace informarle de que dispone de una plaza en el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería...”

Cada visita a las páginas de La Piedra Filosofal es un regreso a casa – a ese Hogwarts al que siempre podremos volver sin importar la edad. Por eso, en este día de celebración literaria, alzamos nuestras varitas para celebrar aquel debut novelístico que transformó el mundo de la lectura. ¡Feliz aniversario, Harry Potter y la Piedra Filosofal, y que la magia continúe viva en cada relectura y en cada nuevo lector que descubre por primera vez el placer de esta historia!

En palabras del propio Dumbledore: “La ayuda siempre se les dará en Hogwarts a aquellos que la pidan.”

Y ciertamente, este libro nos ha brindado ayuda e inspiración a muchos de nosotros: nos enseñó el valor de la amistad, el coraje para enfrentarnos a nuestros miedos y la importancia de mantener la imaginación siempre despierta.

Gracias, Harry, por invitarnos hace 28 años a un mundo donde la magia era real – un mundo al que siempre podremos regresar al abrir un libro. ¡Que siga la magia, hoy y siempre!