
Salvador Reyes: Un copiapino olvidado, Tesoro Literario de Chile
Salvador Reyes: un copiapino olvidado, Premio Nacional de Literatura
Hace unos días, mientras una amiga de la Editorial Alicanto Azul revisaba nuestro buzón de libros usados "Toma un Libro y Deja Otro", me dijo con una sonrisa: "Siempre se puede encontrar un tesoro". "Es un libro de Salvador Reyes, copiapino y Premio Nacional de Literatura", me comentó y conversamos un rato sobre este copiapino olvidado por su tierra natal.

Quizás el traslado a Antofagasta durante su adolescencia y el desarrollo de gran parte de su vida personal y profesional en esa ciudad disminuyeron su conexión con Copiapó. Luego, su carrera diplomática y literaria, que lo llevó a recorrer el mundo, o tal vez el hecho de que a su muerte pidiera que sus cenizas fueran arrojadas al mar frente a las costas de Antofagasta, la ciudad que tanto amaba, hizo que su presencia en Copiapó se desvaneciera con el tiempo.
¿Quién fue Salvador Reyes?
Salvador Reyes fue un novelista, poeta, cuentista, ensayista y periodista. Es una figura central de la literatura chilena del siglo XX. Nacido en Copiapó el 16 de agosto de 1899, Reyes es recordado por su profundo conocimiento y representación del mar, los puertos y su dinámica social, así como por su valentía al enfrentar temas de inequidad e injusticia social en una época donde los derechos de las personas eran prácticamente ignorados.

En su adolescencia se traslada a Antofagasta, una ciudad portuaria que inspiró gran parte de su obra y en la cual cursó sus estudios secundarios, Reyes se nutrió de las lecturas de autores como Salgari, Stevenson, Dumas, Verne, Walter Scott y Conan Doyle. Estas influencias moldearon su imaginación y estilo narrativo, que se manifestarían más tarde en sus escritos.
En 1920, Reyes se trasladó a Valparaíso, donde vivió una vida bohemia junto al poeta Alberto Rojas Jiménez. Esta etapa quedó inmortalizada en su novela "Valparaíso, puerto de nostalgia". Además, su participación en los manifiestos de vanguardia "Rosa Náutica" y "Manifiesto de los nuevos poetas" demuestran su compromiso con los movimientos literarios de su tiempo.
Considerado un escritor de la llamada Generación de 1927, Reyes comenzó a escribir en revistas como Zig-Zag, Letras y Hoy, popularizando su seudónimo "Simbad". En 1939, inició su carrera diplomática, llevándolo a ciudades como París, Barcelona, Londres, Roma y Haití. Este recorrido no solo enriqueció su visión del mundo, sino que también se reflejó en su literatura, dándole una perspectiva global única.

En 1967, Salvador Reyes recibió el Premio Nacional de Literatura, un merecido reconocimiento a su vasta y variada obra. Escritor seducido por el mar, gran parte de su narrativa describe puertos, empinadas callejuelas, bares y cafetines. Sus personajes, capitanes, marineros y cargadores, son retratados como nobles, rudos y libres, siempre en contacto con la naturaleza. Entre sus novelas más destacadas se encuentran "Ruta de sangre" y "Mónica Sanders".
"Hace muchos años, cuando empecé a escribir sobre temas náuticos, algunos colegas [...] me acusaron de farsante [...] yo escribía lo que me gusta. Y me gusta el mar..." — Salvador Reyes

Salvador Reyes
Premio Nacional de Literatura y un Copiapino Olvidado